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¿Qué son los gastos hormiga?


20.03.2024

Escrito por: Bankinter Consumer Finance


Un café a media mañana, los caramelos para la garganta de la farmacia, el regalo para la compañera que se jubila; cada una de estas compras puede parecer insignificante por sí sola, pero juntas representan una parte significativa de nuestro presupuesto mensual.  Son lo que se denomina «gastos hormiga», desembolsos recurrentes que no controlamos y que pueden echar por tierra nuestro plan de ahorro. Si quieres mantenerlos bajo control, sigue leyendo. En este artículo te explicamos qué son y cómo evitar que esas pequeñas fugas de dinero dejen tu cuenta bancaria temblando.

Ejemplos de gastos hormiga

Cuando nos proponemos ordenar nuestras finanzas, tendemos a centrarnos en los pagos más importantes: el alquiler, la hipoteca, los suministros, la cesta de la compra, entre otros. Sin embargo, hay una serie de gastos conocidos como «inofensivos» o «silenciosos» a los que debemos prestar atención porque pueden hacer tambalear nuestra economía: los gastos hormiga, los gastos vampiro y los gastos fantasma.

Los gastos hormiga son desembolsos cotidianos de poco importe que, aunque parezcan insignificantes por separado, se van acumulando y pueden llegar a tener un impacto negativo en las finanzas personales o familiares. Se les llama «hormiga» porque, al igual que estos diminutos y pacíficos insectos, pueden ser pequeños y parecer inofensivos, pero si no se controlan son capaces de devorar nuestros ingresos sin que nos demos cuenta. A continuación, vamos a ver algunos ejemplos de los gastos hormiga más comunes para que sepas identificarlos rápidamente en tus hábitos de consumo.   

El café o la prensa diarios

Tomar un tentempié todos los días en el bar de debajo de la oficina, la suscripción a nuestro periódico digital de cabecera o el paquete de chicles sin el que no podemos vivir son ejemplos de compras hormiga que poco a poco van mermando nuestro presupuesto. Podemos pensar que son solo dos euros, pero al final del mes o del año suman una importante cifra.

Compras por impulso

Las rebajas y los comercios online son los aliados perfectos de los gastos hormiga. Generalmente, nos empujan a adquirir artículos que no son de primera necesidad ni teníamos contemplados en nuestra planificación mensual. Los expertos aconsejan que se dejen pasar al menos dos días entre la primera vez que se ve el producto y la compra. Si pasado ese tiempo seguimos interesados, sabremos que no se trata de un capricho.

Regalos y compromisos

Regalar es una forma de mostrar afecto y agradecimiento que, además, nos proporciona una gran satisfacción personal. No obstante, es importante tener claro cuándo y a quién se regala. Muchas veces nos dejamos llevar por la inercia y acabamos apuntándonos a todas las celebraciones: el cumpleaños del compañero de la oficina, las bodas de oro de la tía abuela del pueblo, la graduación del vecino, etcétera.  Revisa tus compromisos y proponte cumplir solo con aquellos que son realmente importantes y significan algo tanto para la persona que recibe el regalo como para ti.

Transporte

Hay momentos en los que por comodidad o pereza cogemos el coche, un taxi o el autobús para desplazamientos que podríamos hacer perfectamente a pie o en bicicleta. Además de que caminar y pedalear son hábitos saludables y respetuosos con el medio ambiente, te ayudarán a reducir los gastos hormiga en el hogar.

Es importante destacar que no es necesario eliminar de un plumazo estos hábitos. Darse un capricho de vez en cuando o hacer un regalo son gestos importantes para la salud emocional. Lo que sí debemos hacer es supervisarlos y disminuir su frecuencia. Para ponértelo más fácil, hemos diseñado la tarjeta Fracciona que te permite pagar cómodamente sin intereses compras de hasta 500 euros en 13 meses.

Cómo evitar los gastos hormiga

La disciplina y la planificación son dos requisitos esenciales para mantener tus finanzas personales saneadas y alcanzar tus objetivos financieros. A partir de ahí, hay algunas estrategias que te pueden ayudar a reducir o evitar los gastos hormiga.

Lleva un diario de gastos

Compra una libreta pequeña que puedas llevar siempre contigo y en la que anotes cada gasto cotidiano: el pan, un café, un paquete de chicles, un décimo de lotería. Cada pequeño desembolso cuenta.



Aplica la regla 50-30-20

La regla 50-30-20 es un método de ahorro sencillo que te permite establecer un presupuesto mensual. Según esta fórmula, el 50 % de los ingresos se debe destinar a cubrir las necesidades básicas, el 30 % a los caprichos y el 20% se reserva para el ahorro.

Limita las salidas

Reducir la frecuencia con la que sales a comer fuera o a tomar algo con amigos te ayudará a controlar las fugas de dinero. Eso no significa que tengas que renunciar a esos momentos de esparcimiento. Puedes cambiar el café diario por un termo en la azotea de la oficina, llevar la comida de casa y disfrutarla en un parque al aire libre o cambiar las citas en bares por quedadas en casa mientras veis una película o un partido.

Establece metas financieras

Por último, la mejor forma de ahorrar y evitar gastos superfluos es tener un propósito. De este modo no te resultará tan complicado renunciar a un pequeño capricho por un proyecto más interesante, como puede ser la compra de una casa, un viaje o el coche de tus sueños.