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¿Cómo facturar sin ser autónomo?


04.03.2024

Escrito por: Bankinter Consumer Finance


Es muy probable que en algún momento se nos presente la oportunidad de realizar un trabajo puntual, como dar una charla o un curso de formación, para el que nos exigen presentar una factura. Pero ¿se puede emitir una factura sin ser autónomo?

La ley establece claramente que cuando una persona desarrolla una actividad económica por cuenta propia con fines lucrativos y de manera habitual, debe darse de alta en la Seguridad Social y abonar las cotizaciones correspondientes como cualquier trabajador. Sin embargo, el propio texto genera una cierta ambigüedad respecto a la habitualidad de la actividad, que deja la puerta abierta a que se puedan emitir facturas como persona física sin estar dados de alta en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos), siempre y cuando se trate de algo ocasional.

¿Es legal facturar si no eres autónomo?

Los trabajadores autónomos tienen que hacer frente al pago de una serie de cotizaciones a lo largo del año. Concretamente, la cuota de autónomo mínima se sitúa en 2024 entre 225 euros y 530 euros al mes, según los rendimientos netos.

Así pues, son frecuentes los casos en los que una persona que lleva a cabo una colaboración puntual, o bien tiene la intención de emprender un negocio, no genere los ingresos suficientes como para cubrir los gastos de darse de alta como autónomo. ¿Qué se puede hacer en estos casos? Veamos qué dice la ley.

¿Qué es un autónomo o profesional por cuenta propia?

La ley 20/2007, de 11 de julio, del Estatuto del trabajo autónomo, publicada en el BOE núm. 166, de 12/07/2007, dice que se han de considerar trabajadores autónomos:

«[…] las personas físicas que realicen de forma habitual, personal, directa, por cuenta propia y fuera del ámbito de dirección y organización de otra persona, una actividad económica o profesional a título lucrativo, den o no ocupación a trabajadores por cuenta ajena. Esta actividad autónoma o por cuenta propia podrá realizarse a tiempo completo o a tiempo parcial».

¿Se puede facturar sin ser autónomo?

Como veíamos en líneas anteriores, cierto vacío legal permite que podamos emitir facturas como personas físicas sin estar dados de alta en el RETA. La ambigüedad de la ley se encuentra precisamente en la parte que hace referencia a la «habitualidad» con la que se desarrolla el trabajo, ya que no fija unos periodos o plazos orientativos.

La indeterminación sobre este criterio generó que ciertos casos se judicializaran, de manera que en 2007 el Tribunal Supremo dictó una sentencia que creó jurisprudencia en la que señalaba que «una actividad habitual es la que se considera cuando los ingresos del autónomo superan el Salario Mínimo Interprofesional». Por lo que se puede interpretar que, si los ingresos generados por la actividad puntual no superan los 33,33 euros al día o los 1000 euros al mes, se puede emitir una factura como autónomo sin estar dado de alta en el RETA.

Así pues, estos son los tres criterios que se deben cumplir para poder emitir una factura sin ser autónomo:

  • La actividad no es la ocupación principal del trabajador.
  • No se realiza de manera habitual.
  • Los ingresos percibidos están por debajo del salario mínimo interprofesional.

¿Cómo hacer una factura sin ser autónomo?

Aunque no estemos dados de alta como autónomos ni paguemos la cuota mensual correspondiente, sí debemos hacer una serie de trámites para facturar cualquier actividad profesional.

  • El primer paso es darnos de alta en la Agencia Tributaria y cumplimentar el modelo 036 o modelo 037 del Censo de Empresarios Profesionales y Retenedores. Se trata de una gestión sencilla que se puede llevar a cabo de forma telemática y no conlleva ningún desembolso económico.
  • Una vez emitida la factura o facturas debemos cumplir con las obligaciones tributarias correspondientes, es decir, declarar el IVA y el IRPF. Para declarar el IVA tendrás que presentar trimestralmente el modelo 303 y su correspondiente anual que es el modelo 390. Asimismo, para liquidar el IRPF, se presenta el modelo 130 en cada trimestre.

 Si se trata de la primera vez que realizas una factura, verás que el procedimiento es muy sencillo. En internet podrás encontrar ejemplos de modelo de factura sin ser autónomo. Lo único que tienes que hacer es coger una de estas plantillas y a la cantidad bruta que vayas a facturar por tus servicios aplicar una retención del 15 % de IRPF y añadir un 21 % de IVA.

Límite para facturar sin ser autónomo

La ley que regula el trabajo autónomo no hace ninguna referencia al límite a partir del cual es necesario darse de alta para facturar. Por lo que, en principio, siempre que realicemos una actividad lucrativa por cuenta propia, deberíamos facturar como autónomos. Sin embargo, debido a la ambigüedad del texto, podemos atenernos a la resolución del Tribunal Supremo de 2007 del salario mínimo interprofesional. Es decir, el límite de ingresos para darse de alta como autónomo se fija según el importe del salario mínimo interprofesional que para 2024 es de 1323 euros al mes distribuidos en 12 pagas.

No obstante, siempre recomendamos consultar cada caso particular con un asesor especializado, ya que la normativa no concreta todos estos supuestos. De este modo, puede darse el caso de que, aunque no se supere el salario mínimo interprofesional, la administración considere que la actividad es habitual cuando las facturas se presentan de forma continuada.

¿Cuál es la sanción por facturar sin ser autónomo?

En caso de que la Seguridad Social determine que una persona física debería haber facturado como autónomo, el trabajador tendrá que darse de alta inmediatamente en el RETA desde la fecha en la que inició su actividad y pagar un recargo del 20 % de todas las cuotas atrasadas. Además, perderá el derecho a obtener cualquier tipo de bonificación, como, por ejemplo, la tarifa plana para nuevos emprendedores.

Así pues, nuestro consejo es ponerse en manos de una asesoría profesional que determine la mejor forma de proceder en función de la situación personal del trabajador y las características de su actividad puntual.

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