Todos necesitamos parar y tomar unos días de vacaciones para evadirnos de la rutina y volver con las energías renovadas. Europa es un destino perfecto para una pequeña escapada de puente o fin de semana por su cercanía y diversidad. Hay opciones para todos los gustos, desde modernas capitales con una amplia oferta cultural hasta zonas de costa que nada tienen que envidiar al Caribe. En este artículo te proponemos países para visitar en Europa sin gastar una fortuna.
Las mejores ciudades de Europa
París, Roma, Berlín… son ciudades fascinantes que sin duda hay que visitar, al menos, una vez en la vida. Pero, en esta ocasión, queremos mostrarte destinos diferentes que están ganando popularidad por su excelente oferta cultural y de ocio. Además, si eliges viajar por Interrail, podrás diseñar un itinerario con varias paradas en capitales fascinantes, manteniendo tu presupuesto bajo control.
Belgrado (Serbia)
La capital Serbia sorprende por su belleza y vibrante ambiente cultural. Lo que da a Belgrado su identidad única es su ubicación: se encuentra en la confluencia de dos grandes ríos, el Sava y el Danubio, con hermosos paseos a lo largo de sus orillas. No debes perderte el distrito de Savamala, una zona repleta de galerías de arte, centros culturales y cafeterías con música en vivo.
Estocolmo (Suecia)
Estocolmo, la ciudad más grande de Escandinavia, conjuga a la perfección pasado y presente, historia y modernidad, naturaleza y tecnología, lo que la convierte en un destino imprescindible para cualquier viajero. En la capital podrás encontrar desde museos históricos hasta establecimientos culturales más recientes como Fotografiska; además, alberga el renombrado festival Stockholm Pride y es sede de gigantes tecnológicos como Spotify o Mojang Studios.
Edimburgo (Escocia)
Escocia presume de paisajes espectaculares, hermosas ciudades y un rico patrimonio cultural. La capital escocesa es un excelente destino para explorar durante todo el año, con una magnífica oferta gastronómica y de ocio. Además, podrás disfrutar de un sinfín de planes gratuitos, como un paseo por el espectacular Jardín Botánico o una visita a la Galería Nacional de Escocia o la impresionante Catedral de St Giles.
Lausana (Suiza)
Lausana, la segunda urbe en el Lago Lemán y capital del cantón de Vaud, es una ciudad universitaria que destaca por su increíble propuesta de ocio, sobre todo musical. Una visita imprescindible es el Quartier du Flon, en el centro, formado por una serie de antiguos almacenes de 1900 reconvertidos en espacios modernísimos en forma de tiendas, oficinas, viviendas y bares de lo más cool.
Innsbruck (Austria)
Rodeada de montañas, la capital del Tirol es un excelente punto de partida para explorar alguno de los paisajes más sobrecogedores de los Alpes austríacos. Esta encantadora ciudad combina la majestuosidad de la naturaleza alpina con la riqueza de su herencia cultural. No te pierdas el casco antiguo con sus callejuelas sinuosas y restaurantes tradicionales, donde podrás degustar la exquisita cocina tirolesa tradicional.
Oporto (Portugal)
Aunque la vibrante Lisboa atrae a viajeros de todo el mundo, Oporto enamora por sus gentes y su encanto decadente: sus calles estrechas y casas coloridas, las impresionantes vistas tanto de la ciudad como del río, sus galerías de arte antiguo y contemporáneo, sus jardines y museos, y sus pintorescos restaurantes de comida tradicional y sabores del mundo. La amplia oferta cultural, su ambiente cosmopolita y el buen clima durante todo el año completan una oferta imbatible.
Hamburgo (Alemania)
Hamburgo se ha colado en todos los rankings de calidad de vida de los últimos años por su belleza, su amplísima oferta de ocio y sus espectaculares espacios naturales. Visitas obligadas son el casco antiguo, con sus hermosas residencias del siglo XVII, Speicherstadt, declarado Patrimonio Mundial de la Unesco, y el alternativo distrito de St. Pauli, en cuyo mercado se subasta pescado fresco todos los domingos.
Copenhague (Dinamarca)
Podrías estar una semana en Copenhague y aún te faltaría tiempo para ver todo lo que ofrece esta fascinante ciudad. No obstante, incluso en una escapada de tres días podrás apreciar la riqueza cultural de la capital de Dinamarca. La mejor manera de recorrer la ciudad es en bicicleta, el medio de transporte preferido de los daneses, para disfrutar de las vistas del río y de sus extraordinarios edificios históricos. Te recomendamos visitar sus museos y galerías de arte, así como sus mercados, donde podrás degustar desde platos tradicionales hasta recetas internacionales.
Las mejores playas de Europa
Cuando pensamos en dónde viajar por Europa, siempre nos vienen a la mente grandes capitales con sus museos, restaurantes y edificios decimonónicos. Sin embargo, el viejo continente también tiene destinos naturales fascinantes para los amantes del sol y la playa.
Scala dei Turchi, Sicilia (Italia)
Esta hermosa cala próxima a Agrigento es muy famosa por su yacimiento arqueológico y sus aguas cristalinas. De la pared de colinas calcáreas se descuelga un fantástico acantilado esculpido por el mar y el viento en repisas de color blanco, una especie de solárium natural muy codiciado en verano, entre hermosas playas de arena.
Palombaggia, Córcega (Francia)
Al sur de Porto-Vecchio se extienden las hermosas playas de arena blanca de Palombaggia y Santa Giulia. Rodeadas de pinos, son ideales para descansar y bañarse en sus aguas cristalinas. Enfrente, se encuentran las islas Cerbicale, una reserva natural que acoge aves marinas y otras especies autóctonas.
Playa de Papafragas, Milos (Grecia)
Ubicada en la hermosa isla de Milos, esta playa sorprende por los majestuosos acantilados, que alcanzan alturas vertiginosas y envuelven al bañista. Para acceder a este paraíso, los viajeros deben atravesar una estrecha hendidura en la roca, lo que añade un toque de aventura a la experiencia.
Playa de Gjipe (Albania)
En la hermosa costa de la Riviera Albanesa, se encuentra un verdadero tesoro oculto: la playa de Gjipe. Este arenal es un destino de ensueño para aquellos que buscan un lugar tranquilo, rodeado de naturaleza virgen y aguas cristalinas. Con su belleza prístina y su ambiente sereno, la playa de Gjipe es un verdadero paraíso que te dejará sin aliento.
Dunas de Corralejo, Fuerteventura (España)
El Parque Natural de Corralejo es el lugar ideal para disfrutar de la belleza desértica de la isla de Fuerteventura. Esta franja costera de 2,5 por 10,5 kilómetros y situada en el nordeste de la isla ofrece un contraste espectacular: por un lado, el norte, junto al gran núcleo turístico, una enorme extensión de arenas blancas bañada por las aguas turquesas del océano Atlántico; por otro, el sur, volcánico, de colores ocres y rojos. Una maravilla de la naturaleza que no te querrás perder.
Ölüdeniz (Turquía)
Ölüdeniz y su laguna azul es una de las joyas mediterráneas de Turquía. Está dividida en dos zonas diferenciadas. Por un lado, la zona de Belcekiz, con su larga franja de playa; y, por otro lado, el espacio ocupado por el Blue Laggon, situado en un área protegida de pinos y otra vegetación mediterránea que conforma un paisaje idílico en su conjunto.
Playa Stiniva (Croacia)
La playa de Stiniva está considerada una de las más bonitas de Croacia por sus acantilados y sus aguas color turquesa. La arena está formada por pequeños guijarros blancos que contrastan con la vegetación circundante. Su extraordinaria belleza natural la llevó a ser proclamada como monumento natural protegido en 1967 y, desde entonces, ha mantenido su esencia original.
Ghajn Tuffieha Bay Beach (Malta)
Cuando la divisas por primera vez desde la cima de las escaleras que descienden hacia la playa, la primera impresión de la Bahía de Ghajn Tuffieha, con sus imponentes acantilados y laderas de arcilla, es inolvidable. Pero cuando llegas a la playa, la sensación es de haber alcanzado el verdadero paraíso, por su suave y fina arena y sus aguas tranquilas donde hondea la bandera azul todo el año. Además, dispone de todos los servicios y encantadores restaurantes donde disfrutar de un refrigerio.
Como ves, tres días son suficientes para gozar de una escapada de ensueño a algún lugar idílico. Además, si te organizas bien, podrás disfrutar de planes fascinantes sin gastar demasiado dinero. Recuerda revisar las ofertas y comprobar las atracciones gratuitas que ofrecen las grandes ciudades europeas.